1. Antes de empezar a tocar con
flauta una partitura, conviene que tengas claras las notas musicales que
aparecen en ella. Repásalas y asegúrate de que conoces todas las posiciones. Practícalas
frente a un espejo para que compruebes que estás tapando bien todos los
agujeros. Te servirán de ayuda las notas que copiaste en tu libreta de
pentagramas y la ficha con las posiciones de flauta.
2. Haz notas largas para que compruebes que el
sonido es bueno y la intensidad es adecuada (es decir, que no tocas ni
demasiado suave ni demasiado fuerte). Recuerda que cuanto más grave es una
nota, debes soplar más suavemente para que suene bien.
3. Puedes practicar las notas
musicales AQUÍ.
5. Asegúrate de que coges la flauta
correctamente: mano derecha abajo y mano izquierda arriba.
6. Empieza practicando pequeños
fragmentos de la canción con la flauta en la barbilla y haciendo las
posiciones. Cuando te salga así, puedes pasar a tocarla (siempre pequeños
fragmentos al principio y, muy importante: sin correr).
7. Si hay algún fragmento
que te resulta especialmente difícil rodéalo con un lápiz y empieza siempre
tocando sólo eso hasta que te salga bien. Después vas añadiendo el resto de fragmentos.
8. Recuerda que cuando estudiamos no tenemos que tocar la pieza
de principio al fin, sino en pequeños fragmentos. Iremos avanzando a medida que
nos la sepamos. Así podemos ir viendo los progresos poco a poco y antes de que
nos demos cuenta… ¡tocaremos la pieza perfectamente!
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